El Cultural
Primigenio
Enero 2018
LOCKE & KEY
Ésta es una colección magistral, de lo mejor que se ha hecho en décadas dentro del cómic. Locke & Key (publicada de 2008 a 2013) aúna, de manera sublime, el thriller, el terror y la fantasía. La acción arranca de inmediato, con una serie de extraños sucesos y seres, cuyos orígenes se irán aclarando por el camino. Todo lo que ocurre en el presente es consecuencia de actos cometidos hace décadas, y estos se irán desvelando a través de los ojos de los hijos de la familia Locke, que irán investigando el secreto que guardaba su padre y la mansión que éste les legó. La casa oculta una serie de llaves, cada una con un poder diferente, que ayudarán a los hijos a sobrevivir a los terribles entes que les irán acechando.
El autor es Joe Hill, hijo de Stephen King, que quiso salir adelante sin el apellido de su progenitor. Para el momento en que se descubrió su relación ya había demostrado su talento con creces. Un escritor de gran talento, tanto en libros como en viñetas, que aplica un sadismo en sus personajes comparable al de George R. R. Martin en Juegos de Tronos. Joe Hill demuestra una imaginación desbordante, pero no es sólo un maestro de lo fantástico y lo esperpéntico, también sabe tocar las emociones con la habilidad de un pianista al teclado. Sabe cómo conmocionar al lector, haciéndole reír, llorar y estremecerse, como si uno fuera un chaval más de la familia Locke.
Sus guiones no son tramposos, ni improvisados, se nota que están pensados desde principio a fin, con un talento para las historias sólo comparable al del famoso Alan Moore.
Gabriel Rodríguez se ocupa del dibujo, con un estilo que recuerda un poco al tebeo clásico europeo, con cierto toque de manga. No es muy realista pero sí transmite muy bien las emociones de los personajes, y realiza unas composiciones muy trabajadas, que resultan perfectas para una historia con tantos detalles y sorpresas en su desarrollo.
En conjunto, Hill y Rodríguez forman un tándem brillante, que nos deleita con una colección imprescindible para cualquier amante del género fantástico, o simplemente de una buena historia.
