Marzo 2022

Un médico (encarnado por Jared Leto) investiga sobre las enfermedades sanguíneas y en el transcurso de sus experimentos acaba convirtiéndose en una especie de vampiro. El protagonista, atormentado por su necesidad de sangre, buscará una solución al mismo tiempo que va desarrollando sus nuevas habilidades, que le sitúan en un nivel sobrehumano.

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Morbius nació de la necesidad de dar un paso más allá en Marvel Comics, se creó en los 70 (la misma década que aparecieron antihéroes como El Motorista Fantasma o El Castigador). Tras crear héroes de buenas intenciones, era obvio que el siguiente paso era dar a luz a personajes más oscuros y ambiguos. La película sigue todos los estereotipos de este género: un protagonista que aprenderá sobre sus poderes, a la vez que descubre a su némesis, con los debidos toques de humor, drama y romance. Un producto perfectamente envuelto para degustar en una tarde de palomitas donde el espectador vaya con pocas expectativas.

 

A pesar de lo predecible y poco original del argumento, hay que reconocer que el filme cumple de sobras de entretenimiento, sobre todo en el apartado visual. Las escenas de acción son impresionantes, sabiendo conjugar el aspecto vampírico con las peleas sobrehumanas típicas de Marvel.