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Diciembre 2016

PASSENGERS

Una nave espacial se dirige a un nuevo planeta con miles de pasajeros, para establecer una colonia. El viaje tiene que durar 120 años en hibernación, pero algunas cápsulas comienzan a fallar y la pareja, interpretada por Chris Pratt y Jennifer Lawrence, se despiertan 90 años antes de completar el viaje, obligados a pasar lo que les resta de vida atrapados. Aunque el filme parece encuadrado dentro de la ciencia ficción, está más cercana a la historia de Robinson Crusoe, los protagonistas se asemejan a náufragos, los cuales deberán aprender a convivir con el aislamiento y su propia supervivencia dentro de una nave que se convierte en una especie de isla.

Su principal baza es que resulta accesible para todo el mundo, incluido los que no son fans de este género. Ya que la película es muy fácil de seguir, la mayor parte es comedia, y casi todo el peso cómico está llevado por Chris Pratt, un actor que ha cobrado gran popularidad gracias a su papel protagonista en Guardianes de la Galaxia, convirtiéndose en el nuevo Indiana Jones, el héroe carismático, bribón y algo payaso, que acaba cautivando a todos. Le da réplica una resolutiva Jennifer Lawrence, y ambos crean una química entre sus personajes que encaja perfectamente con el tono del filme. 

Junto a ellos Michael Sheen, que interpreta a un androide, un elemento clásico de las películas de ciencia ficción. Un actor británico con experiencia de más de una década en el teatro londinense, que encarna con gracia y elegancia al robot barman que ayuda a sobrellevar la soledad y pesares de los humanos.

Con todo el producto final es una película divertida, entretenida, buena opción para cine en familia, aunque no destaca dentro del género ni aporta nada nuevo u original. Tiene previsto su estreno el  próximo 30 de diciembre.

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